domingo, 23 de octubre de 2016

Una ola de Ira

Siguiendo con los retratos, subo un autorretrato anterior al de la entrada previa.
O pueden ver una ola: una oscura ola de ira bajo una luna de terror.

jueves, 20 de octubre de 2016

La mirada de Gaia



A veces lo importante es volver a lo básico.

Apenas un poco de procesamiento, filtrar colores y agregar otros.
Lo simple muchas veces también es fantástico.

domingo, 16 de octubre de 2016

Deimos

Deimos, el hermano menor de Phobos, es como una enorme y retorcida papa que orbita Marte.
Pero también es el escenario del cuento homónimo de Gonzalo Gossweiler que me tocó ilustrar el mes pasado.
Esta vez la técnica fue bastante variada, pero siempre en digital.




viernes, 14 de octubre de 2016

Sangre y arena


Esto de jugar a partir del original analógico me está gustando. Esto nació como un dibujo, tinta negra sobre papel blamco, y siguió como procesamiento y retoque/pintado digital, capa a capa, proceso tras proceso. Hubo procesamientos posteriores, pero éste es el que mejor quedo.

jueves, 13 de octubre de 2016

Castillos en el aire


Así le pusieron varias personas que vieron esto antes que ustedes.
Esta es la segunda obra de la serie iniciada con "Mundo mínimo", y utilicé una técnica similar, a partir de una foto con el celular del dibujo hecho en papel con lapicera.
No obstante, estos dibujos nacieron para hacer algo en conjunto con Laura Paggi, algo que probablemente muestre por aquí en algún momento.

lunes, 10 de octubre de 2016

Barro peligroso

El mes pasado hubo más ilustraciones mías en Axxón. Sumada a la que mostré hace algunos post para el cuento de Pablo Dobrinin, aquí va la realizada para el cuento "La isla de barro", de Pablo Vigliano.

sábado, 8 de octubre de 2016

Niño prismático

Como informático de profesión que soy, los programas de procesamiento digital de imágenes son mis principales aliados a la hora de la creación.
Tal vez sea porque siento que tengo el ojo pero no la mano, pero me gusta esto de combinar lo que yo trazo con lo que da el azar del procesamiento informático.
Este último tiempo, cuando mi teléfono es mi principal herramienta de expresión (aunque no la única) disfruto de esta experimentación, con resultados como el que acompaña este texto.
Sólo me queda la inquietud de saber cuán válido es esto como arte.